Hoy, al recordar la noche más triste de mi vida
se reabrió mi herida y sobre mi cuaderno
derroché la inspiración proveniente del infierno
de la profunda depresión que me inunda.
Una tristeza desgarradora
se fecunda en mi cabeza
y con una abrumadora certeza
ha convertido mi vida en una pieza forzada.
Es ése recuerdo la más cruel bofetada
y es una proeza soportar tanto dolor
pues es un horror superior a cualquier sensación.
Es por la separación de mi familia
el motivo de mi cruel xenofília y mi profunda aflicción.
Este solemne poema está dedicado
a todo aquel que haya sido afectado
por el problema del divorcio.
Nadie es indemne ante la fractura del consorcio.
Es imposible evitar la dura depresión
y pasar por la horrible sensación
que produce la ineludible situación
de la inadmisible separación.
Mis lágrimas están comenzando a brotar,
ésta será otra noche sin el sueño conciliar,
pero de verdad que necesito desahogar lo que siento
y como agradecimiento por su atención,
en el papel plasmo mi aflicción.