Una mirada

Ésto es la mayor inspiración para el arte,

esa mirada se convierte en la motivación

para seguir escribiendo con tanta admiración

hacia lo que hoy representa mi estandarte.

 Tu mirada es la más hermosa que jamás haya visto

y te confieso que por ella y para ella existo.

Son esos grandes ojos relucientes

los que han inspirado estos párrafos ardientes.

Es latente el gran deseo

de algún día poder verte de frente.

Espero sinceramente que se vuelva realidad

y ser realmente feliz por acción de tu bondad.

No encajo

En este lugar no encajo,

para mí ya nada vale un carajo.

Odio a la gente

y éso es muy evidente.

Odio al mundo

y en la soledad me hundo.

Yo no pedí nacer,

éso es algo que tú no puedes comprender.

No te preocupes, no quiero tú opinión,

sólo quiero estar solo y con razón.

Así podré pensar en la mejor manera

de terminar esta larga espera.

Sin remordimiento

Cada que disparo mi fusil mi alma se estremece 

gracias a la sensación de poder que dentro de mí crece.

Con él, yo decido quien vive y quien perece.

Es como jugar a ser Dios aunque te pese.

Por mi camino voy, arrebatando vidas

y mi única salida es no sentir nada.

Mi voluntad está crucificada, por tanto mi acción justificada.

Al disparar no siento ningún remordimiento

pues ya perdí toda clase de alientos.

Todos se han ido con el viento, dejándome solo

hundido y desolado en este frío polo.

Pero no importa, no los necesito porque al otro lado

mi mente al fin voló. 

Eres tú

Eres tú mi musa, mi inspiración.

En ti encuentro la razón para mi poema.

Con tu sonrisa me libraste de la escaramuza

de la desesperación y con tu protección

me ayudaste a resolver el tan complejo dilema

que representa el problema de la desolación.

Cada que te veo no sé si es real o estoy delirando

pero en cualquier caso siempre le ruego a Dios

que me permita seguir soñando

o seguir estando juntos los dos.

Cuando te miro a los ojos me entra cierto dolor

y es que me da miedo perderte

y de esa manera regrese el temor 

de no poder volver a verte.

Mis últimas palabras

Esta noche es mi fusilamiento,

ya me tengo que despedir

y en medio de lamentos

mi alma tendrá que partir.

Caí prisionero en un encuentro

y el enemigo me ha prohibido vivir.

El pasar del tiempo es lento

mientras espero la hora de morir.

Estoy muy asustado, yo no te miento,

tengo miedo de lo que pueda seguir.

Muerto yo, continuará el enfrentamiento

y muchos más, lo mismo que yo van a sufrir.

Ya han venido a por mí, éste es mi momento

y ésto será lo último que pueda escribir.

Abrázame

¿Qué es más trágico,
la depresión o no tener quien te ayude a superarla?
Cuando alguien te diga: "Estoy triste."
Lo mejor que puedes hacer es abrazarla
pues con ese abrazo, de seguro le diste
la fortaleza necesaria para acabar
con su situación precaria que lo llenaba de maleza.

Gracias a ti, su cabeza no tiene más tristeza.
Ésta es mi ciencia, y te lo digo por experiencia.
Si quieres ayudarme, por favor no dejes de abrazarme.

Feliz cumpleaños

Mi Patria pronto cumplirá doscientos años

y aunque sea un gran motivo, no debemos festejar.

Lo que debemos haces es analizar los daños

que los traidores te llegaron a provocar.

Una vez que mi nación vuelva a ser libre y soberana

todos dichosos podremos celebrar

y devolver la verdadera esencia de la gran nación mexicana.

Pero para ello, todos debemos pelear

y sin claudicar, al enemigo vamos a demostrar

que por sus terribles acciones muy caro lo van a pagar.

Patria querida, yo te ofrendo mi vida,

soy desde hoy tu fiero soldado.

Te confieso que de ser tu salida

aceptaría con gusto ser sacrificado.