¿Quieres saber lo que eres para mí?
Eres la cura de mi mente,
el punto de sutura de mi herida,
mi nueva esperanza de vida.
Tú dijiste que eras la nueva medicina
que puede curar la depresión asesina
y yo con todo el corazón confío en ti,
tú llenarás mi vacío.
Lo sé porque lo veo en el brillo de tus ojos,
dos diamantes hermosos
que mantienen un reflejo constante
de los rayos calurosos del sol.
Tu esencia danza en mi cabeza
porque eres tú la esperanza
de acabar con tanta maleza.
¿Sabes? No hables con nadie de ésto
pero siempre a dios le protesto
el no concebirme a tu lado
pues de esa manera olvidaría mi pasado
y mi poesía habría tomado un giro diferente.
Te confieso que suspiro con el recuerdo de tu rostro
que tengo alojado dentro de mi mente
y me postro de rodillas ante el mismo
porque lo que siento se ha vuelto
más que un simple dogmatismo,
asimismo espero que te enteres
de que te quiero por lo que eres,
pues gracias a ti prospero en este infierno,
el que me volvió tan llano como el acero.
Aunque ésto sea un tributo pagano
quiero que sepas que disfruto tanto de ti
que metí este culto al abismo en mi cabeza
para saciar el fanatismo y el llanto
provocados por tanta tristeza.
Nunca dejes que caiga en el pasado
esta profana poesía,
pues es una ventana a mi alma
y lo que el día de mañana podría dejarla sana.
Eres la cura de mi mente,
el punto de sutura de mi herida,
mi nueva esperanza de vida.
Tú dijiste que eras la nueva medicina
que puede curar la depresión asesina
y yo con todo el corazón confío en ti,
tú llenarás mi vacío.
Lo sé porque lo veo en el brillo de tus ojos,
dos diamantes hermosos
que mantienen un reflejo constante
de los rayos calurosos del sol.
Tu esencia danza en mi cabeza
porque eres tú la esperanza
de acabar con tanta maleza.
¿Sabes? No hables con nadie de ésto
pero siempre a dios le protesto
el no concebirme a tu lado
pues de esa manera olvidaría mi pasado
y mi poesía habría tomado un giro diferente.
Te confieso que suspiro con el recuerdo de tu rostro
que tengo alojado dentro de mi mente
y me postro de rodillas ante el mismo
porque lo que siento se ha vuelto
más que un simple dogmatismo,
asimismo espero que te enteres
de que te quiero por lo que eres,
pues gracias a ti prospero en este infierno,
el que me volvió tan llano como el acero.
Aunque ésto sea un tributo pagano
quiero que sepas que disfruto tanto de ti
que metí este culto al abismo en mi cabeza
para saciar el fanatismo y el llanto
provocados por tanta tristeza.
Nunca dejes que caiga en el pasado
esta profana poesía,
pues es una ventana a mi alma
y lo que el día de mañana podría dejarla sana.
